Berserker empieza con una cabeza humana pegada al volante de un coche. Este es el hilo del que empieza a tirar el taciturno escritor treintañero Hugo Vartán. Una misteriosa cadena de muertes y desapariciones tras las que se perderá, a modo de «Se ha escrito un crimen» en versión mumblecore, cual Dashiell Hammett postcrisis, compartiendo piso y viviendo a base de papas, café y cigarrillos.

  • IMDb rating: 6.2

Película

Berserker, una de las grandes sorpresas del Festival de Sevilla. Un fascinante thriller interruptus protagonizado por Julián Génisson e Ingrid García Jonsson.

Todo arranca con una imagen de impacto: una cabeza desmembrada pegada con cinta aislante en el volante de un coche abandonado en un parking. Entender cómo y por qué una joven aparentemente normal asesinó a su novio, lo decapitó, hizo desaparecer su cuerpo y rubricó el crimen con semejante estampa es la mecha que encenderá la curiosidad de Hugo Vartán, un escritor de poca monta que debe entregar una novela (cualquier novela) a su editora en pocas semanas si no quiere tener que devolver un adelanto que se le pagó como retribución y con el que viene comprando kilos de papas desde hace tiempo, al parecer el ingrediente exclusivo de su peculiar dieta. De hecho, Hugo es un tipo singular, un sociópata a la altura de las grandes mentes de nuestra era, con la única diferencia de que ni es tan brillante como Alan Turing ni posee el talento de Sherlock Holmes. Aunque sí comparte con ambos esa curiosidad que se introduce en nuestro organismo como un virus para hacernos caer en la obsesión.

Como espectadores seremos testigos de cómo la investigación de Hugo avanza hasta convertirse en un monstruo sin cabeza imposible de amaestrar. ¿Cuántas veces un relato nos ha generado unas expectativas monumentales que su resolución ha sido incapaz de satisfacer? A Hugo, y a Berserker, les ocurre algo similar. El escritor tiene entre manos uno de los crímenes más fascinantes de nuestro siglo, un caso cuyas derivas podrían dar un vuelco a la historia de la evolución humana. Pero a su puzzle le faltan piezas, y acaba viéndose derrotado por una cuesta arriba ante la que jamás debería haber claudicado. Berserker , por su parte, sabía de antemano que iba a contarnos la historia de una investigación frustrada, pero no por ello escatima recursos a la hora de constituirse como un thriller apasionante, un rompecabezas a la altura de los grandes hitos del género