Network trata sobre el poder de la televisión, que retrata un mundo competitivo donde el éxito y los récords de audiencia imponen su dictadura. Howard Beale, veterano presentador de un informativo, es despedido cuando baja el nivel de audiencia de su popular programa. Sin embargo, antes de abandonar la cadena, en una reacción inesperada, y ante el asombro de todos, anuncia que antes de irse se suicidará ante las cámaras, pegándose un tiro en directo. Este hecho sin precedentes provoca una gran expectación entre los televidentes y los propios compañeros de Howard.

Mejor Actor, Mejor Actriz, Mejor Guion Original y Mejor Actriz Secundaria (Premios Oscar 1976)

Mejor Director, Mejor Actriz, Mejor Actor y Mejor Guion (Premios Globo de Oro 1976)

Mejor Actor (Premios BAFTA 1977)

Mejor Guion Original Drama (Sindicato de Guionistas WGA 1976)

  • IMDB Rating: 8,1
  • Rottentomatoes: 91%

Película / Subtítulo

Pocas películas con una vigencia casi dramática dentro del mundo de las cadenas de televisión y los noticiarios de hoy, como Network, filmada en Estados Unidos en 1976 bajo la dirección de Sidney Lumet, uno de los grandes realizadores en la historia del cine norteamericano.

Cumpliendo 40 años en este 2016, la película ganó cuatro premios Oscar de los 10 a los que estaba nominada: Mejor Actor Peter Finch, Mejor Actriz Faye Dunaway, Mejor Guión Original Paddy Chayefsky y Mejor Actriz de reparto Beatrice Straight. Creo que la Academia cometió graves omisiones al dejar a un lado a William Holden en uno de los mejores personajes de su carrera, y al propio Sidney Lumet, pues Network es una de sus más logradas películas.

Network es una película coral impecable que completa su reparto con nombres como Robert Duvall, Ned Beatty  y Wesley Addy. La trama, pone sobre la mesa la ambiciosa, y a veces sanguinaria, carrera sin control de los medios informativos por ganar exclusivas y competir por noticias amarillistas que eleven ratings. En esa década de los 70 el poder, el temido “cuarto poder” (expresión que se remonta a los años de la Revolución Francesa), lo ostentaban la prensa impresa y, en particular, la televisión.

Para el año 2016 ya no son el “cuarto poder” sino el primero, si acaso el segundo, y se le ha sumado la radio, pero con mucha mayor preponderancia, internet y las llevadas y traídas redes sociales.

La historia se inicia con la pausada voz de William Holden, quien interpreta a Max Schumacher, editor de noticias de UBS una cadena de televisión en severa crisis de rating, quien nos habla de su amigo y compañero Howard Beale, un explosivo e intenso Peter Finch, quien, por cierto, recibiera el Oscar póstumamente. Beale tuvo sus años de gloria como anchor man o conductor en horario estelar del noticiario de UBS y, como le pasa a la mayoría de los líderes en los medios, que de ser campeones del rating acaban olvidados por el público, Howard Beale va en declive. Schumacher nos cuenta que cayó en desgracia, su rating se desplomó y la cadena decidió despedirlo. En ese mismo año fallece su esposa de más de 30 años de matrimonio y no tiene hijos. El hombre se deprime y empieza a beber.

Pocos días antes de terminar su colaboración en el noticiario, sin avisar Beale cierra con esto: “Como ya he hablado de mucha mierda en esta cadena y mis jefes consideran que me ve poco público, me han pedido que deje el programa. Este noticiario es todo para mí, por lo tanto como ya no tengo nada en la vida, quiero anunciar que la semana entrante me pegaré un tiro en vivo y en directo desde este mismo set”.

Diana, una excepcional Faye Dunaway, es la encargada de contenidos. Mujer joven, bella, ambiciosa, sin escrúpulos, que descubre en la creciente locura de Beale la oportunidad de tenerlo al aire como a un predicador desquiciado, y con ello elevar el rating y por ende los ingresos económicos de la cadena.

O sea explotar el morbo. ¿Le suena? (Lucero Solórzano – excelsior.com.mx)