En Where is the Friend’s House?, en una escuela del pueblo de Koker, al norte de Irán, Mohamed no ha hecho los ejercicios en el cuaderno, y el profesor le amenaza con expulsarle de la escuela si vuelve a repetir la misma falta. Esa misma tarde, su compañero Ahmed toma por equivocación el cuaderno de Mohamed; cuando se da cuenta, decide ir a buscar la casa de su amigo para devolvérselo.

  • IMDb Rating: 8,1
  • RottenTomatoes: 100%

Película / Subtítulos (Calidad 1080p)

 

Abbas Kiarostami era fotógrafo además de cineasta, sin embargo su manera de observar y representar los pequeños huecos de escenarios lejanos y desconocidos siempre estuvieron más cerca de la mirada de un pintor. Como si trabajara con temple al huevo, el director iraní le da color a paisajes naranjas y marrones que parecen fuera del tiempo. “El instante y la eternidad confluyen en una unidad”, decía Wim Wenders sobre la obra de Wyeth, Christina´s World. Eso mismo logra Kiarostami: plasmar una fugacidad imperceptible y tatuarla en el celuloide para vampirizar un gesto mínimo que puede cambiar el curso del universo. Where is the Friend’s House? retrata la odisea que vive un niño cuando decide cumplir una misión sin importar peligros ni consecuencias. Como si se metiera dentro del arcade Wonder Boy, Ahmed (Babek Ahmed Poor) recorre distintas pantallas, desde Kosker hasta Poshteh, y saltea toda clase de obstáculos para devolverle el cuaderno a su compañero de clase que guardó en su bolso por equivocación.

Igual que Bruno Ricci en Ladri di Biciclette y Antoine Doinel en The 400 Blows, Ahmed toma la posta de los nenes literarios que habitan, en mayor o menos medida, la pobreza ( Oliver Twist, Tom Sawyer, Huckleberry Finn) y son ignorados por los grandes por el hecho de ser niños mientras que, paradójicamente, se les exige que piensen y actúen como adultos. “Una película de niños se puede elaborar a partir de pequeñas anécdotas, ya que, en verdad, nada es pequeño en lo que concierne a la infancia”, escribió en 1972 Francois Truffautt, el director que mejor supo traducir el lenguaje marciano de los niños cuatro años después en su película La Piel Dura. Kiarostami entiende en Where is the Friend’s House? que los problemas de los niños son tan inmensos como los anillos de Saturno, y que para Ahmed es de vida o muerte encontrar la casa de Mohamed y así impedir que reciba un castigo del iracundo maestro. En cada uno de sus planos largos confirma que el mundo ideal es aquel que es habitado solo por niños que ven películas filmadas, o pintadas, por el ojo hipersensible de Kiarostami. (Maia Debowicz – ElAmante.com)

Uno de los clásicos problemas de comunicación que suele haber entre niños y adultos está en el hecho de que a veces unos no valoramos de la misma manera los problemas de los otros, que aquello que para un niño es insignificante resulta de gran importancia para un adulto. O el caso contrario, que puede ser especialmente problemático para una mente infantil todavía incapaz de valorar ciertas situaciones en perspectiva. En la que es la primera película de Abbas Kiarostami que dio proyección internacional al célebre director iraní, Where is the Friend’s House? (1987), podemos encontrar ambas situaciones.

En la primera escena de la película vemos a un profesor de primaria dando clases en una zona rural de Irán. Cuando pide a sus alumnos que les enseñe los deberes, uno de ellos, Nematzadeh, se los muestra no en el cuaderno en el que debería haberlos hecho sino en una hoja de papel aparte. El profesor, indignado porque es la tercera vez que le pide que haga los deberes en el cuaderno, le abronca delante del resto y le rompe la hoja. Nematzadeh llora y se justifica diciendo que se olvidó el cuaderno en casa de su primo, quien está en la misma clase y corrobora la historia. Al ver cómo esta bronca afecta tan profundamente al pobre niño y a su amigo Ahmed, que se siente a su lado, no podemos evitar sentirnos mal y pensar que el profesor está exagerando la situación (después de todo, Nematzadeh realmente ha hecho sus deberes).

Pero entonces éste explica por qué le da tanta importancia a que sigan sus instrucciones al pie de la letra: al hacer los deberes ordenadamente en el cuaderno, puede ir viendo su evolución a lo largo del curso. No solo eso, sino que en el fondo lo que está haciendo es inculcar a sus alumnos el sentido del deber, de tomarse las cosas en serio. Poco después llega un alumno algo más tarde porque viene de un pueblo lejano, pero el profesor seguidamente dice que los que vienen de pueblos más lejanos, deberían levantarse antes (y por tanto irse a dormir antes) para llegar a tiempo. Puede que después de todo no sea un mal profesor, y que no esté más que inculcándoles la disciplina que necesitarán para enfrentarse al mundo adulto lleno de responsabilidades. No obstante, le lanza una seria amenaza a Nematzadeh: como no vuelva a hacer los deberes donde toca, le expulsará de la escuela.

Ahmed llega a casa y descubre consternado que se ha traído por error el cuaderno de su amigo. Si no se lo devuelve esa misma tarde para que haga sus deberes le expulsarán de la escuela. Y he aquí como un hecho tan insignificante (una confusión de cuadernos) deviene a ojos de Ahmed algo tan terrible: el presenciar de nuevo cómo humillan a su amigo y el temor a que lo echen del colegio. Where is the Friend’s House? se basará en realidad en esta premisa aparentemente tan sencilla: el viaje que hace Ahmed al pueblo donde vive Nematzadeh para buscarle y devolverle el cuaderno.

Pero he aquí lo irónico de la situación: la mayoría de adultos que se encuentre por el camino no entenderán por qué Ahmed se preocupa de algo tan insignificante, cuando precisamente es otro adulto que ha dotado a esta confusión de una especial gravedad. Y una de las grandes virtudes del film de Kiarostami estará en que nos consigue transmitir con toda exactitud la preocupación y casi obsesión de Ahmed, haciéndonos compartir la sensación de soledad que siente en un mundo donde los adultos parecen indiferentes a sus preocupaciones. Para ellos no es más que un niño buscando la casa de su amigo, para él es una cuestión mayor que nadie más puede o quiere entender.

Where is the Friend’s House? es una de esas películas que parecen engañosamente sencillas por basarse en una premisa tan simple pero que tienen una serie de virtudes que las hace especiales. Por un lado está la maravillosa naturalidad que Kiarostami logra captar de los actores infantiles; de hecho se me ocurren pocos ejemplos en la historia del cine en que se haya logrado con tanta frescura y honestidad, transmitiéndonos sus inquietudes (los rostros de preocupación de Ahmed durante su búsqueda y de Nematzadeh en la tensa escena final son tan auténticos que nos resultan angustiosos) pero sin excederse en el drama. Por el otro está el minucioso retrato de esos entornos rurales y de los personajes adultos, indiferentes a la gran búsqueda de Ahmed incluso en el caso de aquellos que simpatizan con él. Y por descontado está el humanismo que sobrevuela la cinta, ese sentido de la amistad y la fidelidad hasta las últimas consecuencias tan puro en los niños que se nos hace algo casi ajeno al mundo adulto.

En la escena final del colegio, cuando el profesor va corrigiendo los deberes y pasa por el sitio de Ahmed y Nematzadeh lo hace sin ser en absoluto consciente de todo por lo que ha pasado Ahmed a consecuencia de la regañina del día anterior. Precisamente situaciones como ésta reflejan las grandes diferencias entre el mundo infantil y el mundo adulto, cuando no somos conscientes de todo por lo que puede haber pasado un niño a causa quizá de un comentario o una orden de un adulto que, inconscientemente, ha dado pie a una pequeña aventura insignificante a nuestros ojos. La magia de Kiarostami en este film es que consigue que la hayamos vivido en la escala del niño. (ElGabineteDelDoctorMabuse.com)