Asia (Ruthy Pribar – 2020)

La maternidad de Asia siempre ha sido más una lucha que un instinto. Haber tenido a su hija cuando aún era adolescente marcó desde el principio su relación con Vika. Pese a que viven juntas, ambas apenas tienen contacto entre sí. Asia se concentra ahora en su trabajo como enfermera, mientras que su hija se pasa el día con sus amigos en el parque de skate. Esta rutina cambia drásticamente cuando la salud de Vika empieza a deteriorarse. En ese momento, Asia debe convertirse en la madre que su hija necesita desesperadamente. Su enfermedad se acaba convirtiendo en una oportunidad única para reflejar el amor que une a esta pequeña familia.

• IMDb Rating: 6,8
• RottenTomatoes: 95%

Película (Calidad 1080p. La copia viene con subs en español)

Ruthy Pribar es una directora que con esta, su ópera prima ha hecho un eco internacional tremendo. Asia tuvo un estreno on line dentro del Festival internacional de Cine de Tribeca 2020 debido a la pandemia de COVID-19, sin embargo esto no la detuvo, Asia obtuvo rápidamente una distribución en Estados Unidos y fue estrenada dentro de otro Festival en Nueva York.

Esto es debido a que presenta una historia dramática entre madre e hija muy efectivo que ataca la idea de que las mamás deben de ser del todo perfectas, aparte de ser comprensivas y trabajadoras. La forma y fondo de Asia resalta aún más por las dos grandes actuaciones de Shira Haas (Unorthodox) como Vika y Alena Yiv como Asia, una madre soltera de 35 años que debe afrontar la maternidad sola, como muchas mujeres, pero no se siente conectada con su hija del todo. Esta desconexión las lleva a vivir de una forma ajena una de la otra, hasta que una enfermedad terminal en Vika llega para fortalecer, demasiado tarde, sus lazos afectivos.

Aunque la historia está contada desde una narrativa muy lineal y que no propone nada sobresaliente en este aspecto, resalta la historia de Asia, una mujer joven que se embaraza del primer hombre con el que tuvo sexo y debe afrontar su maternidad, sin embargo no es perfecta, no tiene que serlo y, ahí radica el valor de la película. Las mujeres en gran parte del mundo, por lo menos en las culturas europeas y occidentales deben ser ejemplos de excelencia, apoyo, rectitud y perfección por el sólo hecho de ser madres, aparte el trabajo de ser esposas. Este papel que la sociedad les ha impuesto se ha vuelto tan pesado que se ha vuelto una carga y, para la que no lo cumpla, un estigma doloroso y cruel

Asia tiene una desconexión abismal con su hija que está pasando a la vida adulta, ambas viven así, reaccionando a la indiferencia que cada una tiene hacia la otra. Hasta una enfermedad que afecta las funciones motoras de Vika la afectará hasta que prácticamente deje de respirar. Este botón de la desgracia activa en Asia este sentido maternal de forma tardía para con su hija, es a partir de este momento, aunque demasiado tarde, cuando se da cuenta las horas y años que perdió de estar con su hija, y viceversa.

Este enfoque crítico y trágico al mismo tiempo sobre la maternidad que la directora le da a su historia es lo que atrapa al espectador sin caer en el panfleto ni feminista, pero tampoco en la lección moral. Una de las muchas cosas valiosas del filme es que no intenta aleccionar a nadie sobre cómo ser una buena madre o no serlo y también desde la perspectiva de Vika, nunca se intenta criticar la forma de actuar de los adolescentes maduros, simplemente presenta a dos personajes femeninos tal cual como son, reaccionando a sus propias circunstancias que involucra la propia relación disfuncional que por años han llevado.

Tampoco y, aunque pudo haberlo hecho, nunca cae en el melodrama lagrimero que es muy efectivo para llamar a los espectadores de manera mucho más fácil. Labra su propio camino por medio de un delineado de personajes muy efectivos, que no tienen agenda de ningún tipo, simplemente están ahí para contar una historia, buena, efectiva y sencilla. (Luis Toriz – OculusTodoElCine.com)