Pasazerka trata sobre una relación entre dos mujeres. Terminada la Segunda Guerra Mundial, Liza huyó de Europa. Hasta entonces había sido vigilante en el campo de concentración de Auschwitz. Cuando años después regresa, durante la travesía en barco reconoce un rostro que no ha podido olvidar.

Mención Especial (Festival de Cannes 1964)

  • IMDB Rating: 7,6

Película (La copia viene con subtítulos en castellano)

Una gran película olvidada y poco conocida, obra póstuma del director también olvidado Andrzej Munk. La historia de la relación personal entre una oficial alemana y una reclusa judía que sirve para denunciar la soberbia del mando opresor del que dependen vidas humanas que se pueden eliminar con un simple gesto. Además es un magnifico estudio sobre la imposibilidad del ser humano de huir de su pasado, pues existe la conciencia personal que impide dicha huida y así vemos la historia de Liza, una mujer alemana celadora uniformada de las SS en un campo de concentración.

Pasazerka está rodada en el interior del campo y nos muestra la vida cotidiana de los reclusos incluyendo una serie de fotografías fijas de Witold Lasiewicz que sirven para dar una explicación y un final a la película. Pasazerka tiene momentos de una gran emoción como cuando vemos a un niño prisionero acariciando a un perro pastor alemán ante la sonrisa de su amo, un soldado nazi, o la secuencia en la que la orquestilla de presos toca de forma imperfecta un concierto de Bach lo que la hace más real y por encima de todo contemplamos una relación muy peculiar entre un ser dominante y otro sometido, un claro antecedente de la polémica película de Liliana Cavani “Portero de noche”, de 1973 o de la posterior “El lector”, de Stephen Daldry, de 2008 con una conclusión desesperanzadora y triste: las imágenes del pasado y la mirada de Marta perseguirán y atormentaran a Liza hasta su muerte. Rodada en el interior del mítico campo de concentración nazi de Auschwitz, está basada en una historia de Zofia Posmysa que Andrzej Munk escuchó por radio quedando muy impresionado y más tarde comentó: “Con Pasazerka he querido decir que el ser humano no puede escapar a su pasado y que es responsable de sus actos  ante  la sociedad y ante su conciencia”. Una magnífica fotografía en blanco y negro, al morir Munk antes de acabar el rodaje, sus colaboradores no añadieron nada nuevo a lo que ya estaba rodado y se limitaron a montar las escenas ya filmadas bajo la forma de tres “flashback” y solamente añadieron una “voz en off” para explicar la naturaleza inacabada de la película y para conseguir el final de la misma. Pasazerka es en suma un estudio sobre el sufrimiento y el dolor y sobre los valores del ser humano cuando está sometido a presiones externas. (Mario Delgado Barrio – nosolocine.net)