The Happiest Day in the Life of Olli Mäki transcurre en el verano de 1962, cuando Olli Mäki aspira al título de campeón del mundo de peso pluma en boxeo. En todas partes, tanto en el campo como en Helsinki, le predicen un futuro lleno de éxito. Sólo tiene que perder peso y concentrarse. Pero, hay un problema, Olli se ha enamorado.

Mejor Película en la Sección Un Certain Regard en el Festival de Cannes 2016
Premio FIPRESCI en los Premios del Cine Europeo 2016
  • IMDb Rating: 7,5
  • RottenTomatoes: 100%

Película / Subtítulo

The Happiest Day in the Life of Olli Mäki es una pequeña y encantadora tragicomedia rodada en blanco y negro y en 16 milímetros que ganó la competencia Un Certain Regard, y claramente no es un premio que desentone.

La ópera prima del Juho Kuosmanen narra la historia del Olli Mäki del título (Jarkko Lahti, muy convincente en su primer trabajo para el cine), un boxeador de pueblo al que le surge la enorme posibilidad de enfrentar en Helsinki al campeón del mundo estadounidense. Estamos en el verano de 1962 y el tono melancólico será una de las constantes de este trabajo.

El pobre de Olli sufre todo tipo de presiones: de su entrenador (el gran Eero Milonoff), de los organizadores, de los auspiciantes (que sacan provecho sin que él se entere), de las autoridades (que ven el eventual triunfo deportivo como una posibilidad de exaltación patriotera), mientras él sufre un problema extra: debe bajar varios kilos en el entrenamiento de las semanas previas para dar una categoría más baja que la de su contrincante.

Las penurias de nuestro querible antihéroe, la relación con su novia (él es un auténtico romántico), las pequeñas rebeldías y, claro, todo lo que rodea a la pelea (hay un buen retrato del espíritu de época) son algunos de los elementos que The Happiest Day in the Life of Olli Mäki va desarrollando con paciencia, criterio y solidez.