En The Quiet Man, Sean Thornton es un boxeador norteamericano que regresa a su Irlanda natal para recuperar su granja y olvidar su pasado. Nada más llegar se enamora de Mary Kate Danaher, una chica muy temperamental. Para conseguirla deberá luchar contra las costumbres locales, además de la oposición del hermano de su prometida.
Mejor Director y Mejor Fotografía Color en los Premios Oscar 1952
- IMDB Rating: 7,9
- Rottentomatoes: 89%
El talento de John Ford se palpa en cada plano. Nadie más que él podía conseguir esa aparente sencillez que irradia la película. Esa verdad tan profunda, que hace que parezca que no hay guión, que todo fluye tal cómo debería ser. The Quiet Man es un canto de amor a Irlanda, la tierra de sus ancestros. Desde la primera secuencia, Ford consigue que respiremos con él el aire irlandés. Consigue elaborar la que quizá sea su película más personal, a la vez, la más bella de su extensa filmografía. Solo Ford es capaz de dotar a una historia como esta de una importante carga sentimental sin ser en ningún momento empalagoso. El profundo sentido del humor del director se hace patente a lo largo de The Quiet Man.
El personaje de Sean Thornton es probablemente el mejor que ha interpretado John Wayne. Un hombre tranquilo, pacífico, terco, nostálgico, honrado, que es tomado por cobarde, y que debe enfrentarse a sus propios temores.
1 Comment
Join the discussion and tell us your opinion.
[…] La película cuenta, además, con un buen guion que condensa y fusiona los casos presentados en la novela, manteniendo el suspense en los momentos adecuados y combinándolos con dramatismo y comicidad cuando conviene. Gideon of Scotland Yard, fue una colaboración entre la filial británica de la Columbia y John Ford Production. Se rodó en 1957, pero la Columbia no la distribuyó hasta 1958 y además en dos versiones: una en blanco y negro y de metraje más reducido para Estados Unidos y otra más larga y en technicolor para Europa. En Estados Unidos fue un fracaso, en parte porque chocaba ver una película de Ford dedicada a la policía británica -Ford contribuyó habitualmente a financiar al IRA y no ocultó nunca su simpatía por esa causa como queda claro en The Quiet Man. […]