The Spectacular Now cuenta la historia de Sutter Keely, un estudiante que un día conoce a Aimee Finicky, una tímida e inadaptada adolescente. Sutter se propone entonces realizar un experimento social con el fin de comprobar si es capaz de influir en la vida de las personas, y la cobaya será Aimee.

Premio del Jurado al Mejor Reparto en el Festival de Sundance 2013

  • IMDB Rating: 7,1
  • Rottentomatoes: 93%

Película / Subtítulo

 

Cuando uno lee, habitualmente, las listas de fin de año que la prensa y la crítica norteamericana arma con sus mejores películas siempre le sorprenden algunas cuestiones. Más allá de diferencias específicas de opinión respecto a tal o cual película, una de las cosas que siempre me llama la atención es la ausencia de algunos géneros. Ya es un clásico que la comedia suele estar ausente y más allá de que haya películas en esas listas que poseen elementos cómicos y momentos muy graciosos (como The Wolf of Wall Street) no se puede hablar de comedias hechas y derechas en casi ningún ranking. Del mismo modo, suelen faltar los tanques de taquilla y las superproducciones de fin de año, a las que muy ocasionalmente se les permite rankear entre lo mejor de cada año.

En este caso, el género o mini-género cuya ausencia es bastante constante y consistente es el género “juvenil”: la película de adolescentes. No me refiero necesariamente al nuevo género Young Adult de películas de acción protagonizadas por teens (tipo The Hunger Games) sino a las películas sobre adolescentes de escuela secundaria o universidad y sus problemas familiares, romances y conflictos de la edad: las coming of age stories, o películas de “crecimiento” o “pérdida de la incocencia”. Pueden ser más cómicas o dramáticas (se me ocurren gemas recientes como Superbad o Adventureland), pero tengo la impresión que no se las destaca y valora lo suficiente, como si fuera un género algo menor.

De las películas de ese tipo que circularon este año, sin duda la que -en mi opinión- está encaminada a convertirse en un clásico es The Spectacular Now, la segunda película de James Ponsoldt (The End of the Tour) que se estrenó mundialmente a principios de 2013 en Sundance y luego tuvo un estreno bastante pequeño en salas norteamericanas. Recibió sus buenas críticas, pero trascendió muy poco. Yo conocía el título por la novela de Tim Tharp, que tuvo cierta repercusión, pero no me esperaba una película tan sutil, inteligente y compleja respecto al mundo que retrata.

The Spectacular Now cuenta la historia de Sutter (extraordinario Miles Teller), un chico de último año de la secundaria, que no entra del todo en las categorías de popular, perdedor o ninguna de las otras categorías escolares clásicas del cine norteamericano. Es un chico simpático e ingenioso, con muchos amigos y una bella novia, pero no pertenece a ningún grupo predecible. Es, además, un poco alcohólico. A diferencia de sus amigos y otros bebedores sociales, Sutter tiene un trabajo al que suele ir algo borracho y beber a escondidas. Tampoco tiene muchos planes para el futuro. Le gusta disfrutar el presente y no hacerse problema por nada.

Pero su novia, Cassidy (Brie Larson, muy distinta a como está en Short Term 12, otro muy buen filme independiente del año pasado) se cansa de su falta de proyectos y lo deja. Tras una noche de alcohol, Sutter terminará durmiendo en la entrada de la casa de Aimee (Shailene Woodley, la hija de George Clooney en The Descendants) otra chica de la escuela a la que apenas conoce y con la que se hace amigo. Ella es, sí, más solitaria que el gregario Miles (lee manga y comics de fantasía) y podría decirse que es la típica adolescente bonita que aún no es consciente de serlo. Miles empieza a verse cada vez más con ella, en principio para poner celosa a su ex novia y tratar de reconquistarla, pero de a poco empezará a notar que cada vez disfruta más de la compañía de Aimee.

Con la excepción de un interludio dramático en el que Sutter y Aimee van a visitar al padre de él (secuencia que intenta poner un eje temático/narrativo fuerte en la trama y que no termina de funcionar del todo bien), The Spectacular Now sorprende por su entrega a los tiempos y minucias de la vida adolescente, bajando el nivel conflictivo de casi todas las situaciones que típicamente resultan explosivas en el género. Sí, hay un baile de graduación pero no sucede nada dramático en él. Sí, hay conflictos entre novios y ex novios, pero nada que no pueda arreglarse conversando. Y hay un foco muy claro en estos dos chicos al punto tal que, casi como sucede en la realidad, el mundo alrededor de ellos parece no existir.

Lo llamativo en The Spectacular Now es el grado de comprensión del mundo adolescente que parecen tener el director y, obviamente, los actores. En la mejor escena del filme -para figurar entre las mejores del año y de la historia del género- está una larga conversación que ambos tienen caminando en una fiesta al aire libre y que está filmada en un plano secuencia de varios minutos. Tanto los temas de conversación como las miradas y el lenguaje corporal van dejando entrever el estado emocional de los protagonistas, algo que el director cubre de manera notable siguiendo sus ritmos internos y la evolución lógica de cada personaje.

Lo mismo sucede con los cruces entre Sutter y Aimee con Cassidy, la ex de él. Todos los intercambios y “problemas” entre las parejas (Cassidy sale ahora con un atleta de la escuela) son de un grado de sutileza que pocas veces se ve. Ponsoldt no sólo respeta la inteligencia del espectador dándose cuenta que no hace falta dramatizar excesivamente este tipo de conflictos para dejarlos claramente expuestos, sino que respeta básicamente la inteligencia de los personajes, a quienes muestra casi siempre capaces de encontrar soluciones “conversadas” a los problemas sin aumentar la presión dramática con dificultades y confusiones típicas del género.

Aimee también tiene planes a futuro y eso volverá a ser un problema para Sutter, cuyos conflictos parecen más bien estar en el pasado. Y si bien la exploración de ese conflicto familiar no resulta lo más logrado de la película (ahí sí aparece la mano algo forzada del guión), no hay nada en la caracterización de los chicos que  huela a cliché. Sí, Sutter es bastante egoísta y alcohólico, pero es igualmente amable, simpático, generoso e inteligente. Y Aimee es apocada y un tanto tímida hasta para enfrentar sus propios problemas familiares, pero eso no la convierte del todo en la caricatura de una nerd. Es, en algún sentido, una chica que todavía no encontró su lugar (y sus pares) en el mundo. Uno tiene la sensación de que le va a ir bien en el futuro.

Eso es, finalmente, lo notable de The Spectacular Now. Uno conoce, se encariña y aprende a querer a estos dos personajes al punto que quiere saber que será de ellos por el resto de sus vidas. Como en una muy buena novela (que tal vez lo sea, debería leerla), uno aprende a vivir alrededor de sus protagonistas -sus ideas, sus sentimientos- que da pena dejarlos y no saber como siguen sus vidas. El logro máximo del Ponsoldt y sus talentosísimos protagonistas es haber creado dos seres humanos reales, que viven y palpitan en la pantalla y que podrían hacerlo fuera de ella (Diego Lerer – MicropsiaCine.com)