Categoría: Kitty Green

  • The Royal Hotel (Kitty Green – 2023)

    The Royal Hotel (Kitty Green – 2023)

    En The Royal Hotel Hanna y Liv son dos amigas estadounidenses que viajan como mochileras por Australia. Tras quedarse sin dinero, Liv, buscando vivir una aventura, convence a Hanna de aceptar un trabajo temporal tras la barra de un pub llamado The Royal Hotel, en una remota localidad minera del Outback. El dueño del bar, Billy, y un grupo de lugareños les ofrecen una desenfrenada introducción a la cultura del alcohol en Australia, pero pronto Hanna y Liv se ven atrapadas en una inquietante situación que rápidamente escapa a su control.

    • IMDb Rating: 5,8
    • RottenTomatoes: 89%

    Película / Subtítulos (Calidad 1080p)

     

    Después de adentrarse en el espeluznante mundo de las asistentas en grandes empresas (en un contexto claramente weinsteiniano), la cineasta Kitty Green continúa en The Royal Hotel su exploración de la terrorífica experiencia femenina que es habitar e intentar sobrevivir en un mundo de hombres. La protagonista de The Assistant estaba magistralmente interpretada por una Julia Garner que supo mostrarse pequeñita en ese contexto hostil que quedaba capturado perfectamente en la película, debut en ficción de Green. Garner repite como protagonista en esta nueva cinta de la melburniana interpretando a Hanna, una joven norteamericana que, junto a su amiga Liv (Jessica Henwick), se encuentra de mochileo alocado en Sydney. Cuando se dan cuenta de que se les están terminando los ahorros deciden apuntarse a un programa de trabajo temporal para viajeras. Así, sin comerlo ni beberlo, las dos chicas se encuentran en medio del Outback, un lugar remoto de la geografía australiana, en una taberna en medio de la nada. El sitio, regentado por Billy (un estupendo Hugo Weaving barbudo y tosco), da servicio e ingentes cantidades de alcohol al grupo de mineros residentes. Las jóvenes, que tenían en mente unas divertidas y desmelenadas vacaciones para sí mismas, se ven inmersas en un microcosmos masculino y belicoso.

    Con The Royal Hotel, que es el nombre juguetón que tiene el destartalado bar, Kitty Green no solamente suma una segunda película a su universo cinemático de «mujeres currando de forma precaria en entornos incómodos para ellas», sino que además hace una nada tímida incursión en el género del terror. Green construye una atmósfera enrarecida y cargada que, de incidente en incidente, se va generando más y más desazón. En cierta manera, ya era así en The Assistant, pero en esa ocasión la directora no llegaba a dinamitar toda la tensión que iba acumulando el personaje de Garner. En este nuevo enfoque se atreve a llevar el malestar mucho más allá. El espacio que estarán habitando las chicas no solamente no es un lugar seguro: es abiertamente violento hacia ellas. Kitty Green nos sitúa en los zapatos de las dos turistas, desubicadas, y es desde su perpleja mirada que se nos explica la naturaleza disfuncional de ese grupo de hombres y sus rituales cotidianos. Rituales de risotadas a costa de las jóvenes, de sí mismos, rituales de violencia, de hostilidad, de necesidad de marcar territorio y, a la vez, de incomodarlas en todo momento.

    Hanna se muestra absolutamente desconfiada ante tal panorama y, de hecho, ya en un primer instante incluso le plantea a Liv irse ese mismo día. Sin embargo, su compañera es mucho más despreocupada, e interesada por lo pintoresco de la situación, le divierte imaginarse que están viviendo una aventura que se pueda convertir en anécdota más adelante. El tono que toma la película transita muy fluidamente y de forma inteligente entre esa ligereza con que se lo toma Liv (y que, como espectadoras nos hace vivir también: hay momentos realmente hilarantes) y la reticencia de Hanna (momentos en los que la risa queda congelada en una mueca de miedo). El paisaje árido de la zona de Australia en la que se encuentran juega un papel importante a la incomodidad de la historia que, efectivamente, va mutando poco a poco de la contrariedad hacia el terror más puro. Como mujeres, estamos acostumbradas a vivir ciertas circunstancias con las alarmas puestas. Una de ellas, que seguro que tenemos como experiencia compartida, es la de no sentirse a gusto en un lugar cerrado (y además, como en el caso de The Royal Hotel, incomunicado) con una energía profundamente machista. Tanto los hombres que tienen apariencia más amable y suave, o alguna mujer que también hay, como los que se presentan de forma confrontacional desde el minuto uno: todos acaban representando una amenaza real para Hanna y Liv.

    Aunque es cierto que en esta segunda película Kitty Green expande el escenario en el que se dan esas violencias, y en esa expansión hay cierto grado de desmadre, también hay una sensación de disfrute y dejarse llevar. Al final, ese desorden a la hora de tratar con los diferentes personajes habituales del bar también aporta a la subjetividad de las chicas y cómo ellas lo ven. El personaje de Julia Garner, en The Assistant, no podía hacer nada frente al grupo de hombres encorbatados a los que servía durante una larguísima jornada de oficina. Green ofrece en su nueva película un punto de catarsis empoderante cuando, en el tramo último de metraje, a las dos amigas no les queda otra opción que tomar el asunto en sus propias manos porque al final todo se reduce a que es «o ellos o nosotras». (Julia Gaitano Mendizábal – ElAntepenúltimoMohicano.com)

  • The Assistant (Kitty Green – 2019)

    The Assistant (Kitty Green – 2019)

    En The Assistant, Jane es una recién graduada universitaria y aspirante a productora de cine que consigue un trabajo aparentemente ideal como asistente de un poderoso ejecutivo de la industria del entretenimiento. Su día es muy similar al de cualquier otro asistenta: preparar café, cambiar el papel en la fotocopiadora, ordenar el almuerzo, organizar viajes, recibir mensajes telefónicos, etc. Pero a medida que Jane sigue su rutina diaria, es cada vez más conscientes del abuso que colorea insidiosamente cada aspecto de su jornada laboral, una acumulación de degradaciones contra las cuales Jane decide adoptar una posición, quizás solo para descubrir la verdadera profundidad del sistema en el que ella ha entrado.

    • IMDb Rating: 6,2
    • RottenTomatoes: 92%

    Película / Subtítulo (Calidad 1080p)

     

    Abuso. Violación. Coerción o explotación sexual. Une pensaría que una película que trata estos temas mencionaría por lo menos una vez alguna de estas palabras o algún otro sinónimo. Y si nunca son dichas, entonces evidentemente tiene que haber alguna escena que muestre una situación de estas características. Pero The Assistant, dirigida por Kitty Green, (y a diferencia de Bombshell, otra película que aborda la misma temática) va en contra de estos supuestos y rompe con el estereotipo de necesitar lo explícito para hablar de una cuestión difícil y dura.

    The Assistant es lenta y silenciosa. No tiene un guión muy extenso y claramente no es para todo tipo de espectadores. Pero para quienes estén interesades en la temática y no tengan problema en ver más acciones que escuchar diálogos, este filme es un gran ejemplo de lo fantástica que es la sutileza en el cine cuando es utilizada correctamente.

    La historia sigue el día completo de una asistente, llamada Jane (Julia Garner), en una productora cinematográfica en Nueva York. Es cierto que, grosso modo, puede decirse que la película no «muestra» nada demasiado interesante: es algo tan simple como un día en una oficina cualquiera. Pero esto sería quedarse en una lectura superficial de lo que la cinta realmente sugiere. Lo que sí muestra y explora son conversaciones por lo bajo en los escritorios, risas de complicidad, un aro solitario tirado en el piso al lado de un sillón en la oficina del jefe, justificaciones pobres sobre acciones reprochables, viajes incómodos en el ascensor, mails que contienen disculpas constantes; en fin, murmullos de una situación terrible que todes conocen pero nadie denuncia.

    Es esta magnífica sutileza la gran fortaleza de The Assistant. Es esta cualidad la que hace que la cinta sea totalmente relevante y real. Une ve en la pantalla momento tras momento, un día laboral normal. No se ve ninguna escena explícita, no se ven situaciones de violencia extrema. No es necesario. Lo único que es necesario ver es un día en esa empresa. En un sólo día, no solo se hace palpable la normalización estandarizada de agresiones laborales y abusos en su mayoría de poder (y a veces sexuales), sino que también se expone la complicidad del silencio y la justificación de que todes «saben lo que hacen» y «son capaces de tomar sus propias decisiones».

    Si bien es cierto que The Assistant está basada en un caso real, esto nunca es mencionado. Desde el minuto que empieza hasta el minuto que termina, les espectadores nunca escuchan o ven el nombre de la compañía, ni el del jefe, ni de nada que pueda relacionarse con el caso en el cual se basa. Es cierto que para muches esto puede ser un factor negativo. Sin embargo, el detalle de exponer la temática pero sin nombrar entidades permite extrapolar el caso a cualquier espacio laboral y esto declara que ningún lugar está exento de caer en este comportamiento.

    The Assistant no ofrece soluciones ni muestra luchas contra este comportamiento. Esa no es su función. Pero lo que sí hace es cortar una tajada de la realidad y ponerla bajo la lupa, para que todes la podamos examinar. (Vicky Resico – EscrituraFeminista.com)